Busco una huella en la arena
esa que luego se lleva el mar,
ser el blanco de tus ojos.
El viento siembra
camino de nostalgia,
me lleva hasta el rincón
de tus secretos.
Quiero la llave
que abra tu puerta,
encontrarte
con mis manos vacías,
esta noche eterna.
Ser puerto de tu destino,
y perderme,
a la sombra de tus brazos.